Alquimia Hotel Boutique, Tulum

El hotel tiene una ubicación excelente, justo en la playa con acceso fácil y cerca de buenos restaurantes. Disfrutamos de la comida y la atención del personal, aunque hubo algunas interrupciones del suministro eléctrico y el ambiente podría ser más animado por la noche. Las cabanas donde nos alojamos eran cómodas, pero el diseño del baño era un poco raro y carecían de ciertos amenities como un televisor y una kettle eléctrica.

El hotel tiene una ubicación ideal frente a la playa, con acceso directo a una hermosa playa de arena blanca. Las habitaciones son cómodas y limpias, pero la experiencia de cena podría mejorar. El personal es atento, aunque sería ideal contar con más personal que hable inglés. Los precios son razonables, pero la disponibilidad de servicios como Wi-Fi y menús podría mejorarse.

El hotel tiene una ubicación increíble, justo en la playa, lo que nos permitió disfrutar de una hermosa playa de arena blanca. Las habitaciones son agradables, aunque la falta de algunas comodidades hizo que la experiencia no fuera ideal. El personal fue muy amable y servicial, pero creo que podrían mejorar su servicio al cliente, especialmente para quienes no hablan español. La comida era buena, pero el horario limitado del restaurante hizo que las noches fueran un poco silenciosas.

El hotel se encuentra en una ubicación privilegiada, justo frente a la playa, lo que lo hace ideal para quienes buscan relajarse junto al mar. Las habitaciones son cómodas, pero algunas pueden no cumplir con las expectativas en términos de diseño y ruido. La experiencia de comedor fue agradable, aunque podría ser mejor si ofrecieran más opciones durante la cena. El área de la piscina es un gran plus, aunque hubo algunos inconvenientes con cortes de luz durante nuestra estadía.

Disfrutamos de un día perfecto en el club de playa. El precio fue muy accesible, ya que por 400 pesos incluía una cama con sombra o tumbonas, una toalla, una comida y una bebida. El servicio fue excepcional, con atención personalizada de Roman. La comida, como el burrito de camarón, estaba deliciosa. Sin embargo, notamos que la piscina estaba un poco más sucia en nuestro segundo día, lo que fue un pequeño inconveniente.